
Hace poco me tope con un estudio comparativo entre las técnicas de carrera “Barefoot” (descalzos) y “Shod” (calzados) que pueden encontrar en este enlace. El propósito fue valorar y comparar parámetros cinemáticos y de economía de esfuerzo para determinar si existían diferencias significativas que pudieran predecir un mayor o menor rendimiento y economía de esfuerzo para los corredores descalzos.
La introducción señala la creencia de que los humanos han nacido para correr y comenzaron haciéndolo descalzos, sugiriendo que el calzado moderno podría modificar la mecánica natural de la pisada.
En cuanto a los materiales y métodos, participaron 20 corredores sanos y físicamente activos, divididos en dos grupos de 10: uno practicando la técnica Barefoot y otro la técnica Shod. Se evaluaron posibles patologías, parámetros cinemáticos de la carrera y variables predictoras de la economía de esfuerzo.

Para los corredores Barefoot, se estableció como criterio de inclusión haber practicado la técnica durante al menos 3 meses. Los grupos se igualaron en edad y sexo en la medida de lo posible. Las evaluaciones incluyeron mediciones antropométricas (peso, talla, IMC, perímetro de pierna), valoraciones funcionales (acortamiento del tendón de Aquiles, dismetría del tren inferior, lateralidad), y la valoración de parámetros cinemáticos mediante el sistema OptoGait. Este sistema utiliza células fotoeléctricas y cámaras de alta velocidad para medir datos como longitud de paso, longitud de zancada, tiempo de vuelo, tiempo de contacto, altura del paso, velocidad y ritmo. Los datos cinemáticos se recogieron en una sección de 10 metros dentro de un recorrido de 36 metros para evitar fases de aceleración/deceleración. Variables como la fase de contacto, pie plano y propulsión fueron excluidas debido a las limitaciones del software OptoGait para la técnica Barefoot. La economía de esfuerzo se midió mediante frecuencia cardíaca (FC) y percepción subjetiva de esfuerzo (escala de Borgg) en una prueba de campo de casi 14 km, donde los corredores mantuvieron su ritmo de competición. Los datos se analizaron estadísticamente usando SPSS, estableciendo la significación en p > 0,05.
Los resultados mostraron que, aunque existían algunas diferencias en las medias de edad, peso, altura e IMC entre los grupos, estas no fueron estadísticamente significativas, considerándolos homogéneos.
Se encontraron diferencias significativas en los siguientes parámetros cinemáticos:
- Tiempo de vuelo: Fue menor en los corredores Barefoot (p=0,05 y p=0,059).
- Velocidad media y ritmo: Fueron mayores en los corredores Barefoot (p=0,038 para ambas). La velocidad de la pierna no dominante también fue significativamente superior en el grupo Barefoot.
Para el resto de las variables cinemáticas analizadas, no se encontraron diferencias significativas entre grupos. La longitud de paso y zancada fueron superiores en Barefoot, pero sin significancia estadística. El tiempo de contacto y la diferencia de altura del centro de gravedad fueron menores en Barefoot, tampoco con significancia estadística.
En cuanto a la economía de esfuerzo, no se encontraron diferencias significativas entre ambas técnicas. Aunque los corredores Barefoot tuvieron pulsaciones medias inferiores en el km 3 y 14, la diferencia de pulsaciones entre el km 3 y 14 fue menor en los corredores Shod, sugiriendo una posible mayor economía, pero sin alcanzar significación estadística. La percepción subjetiva de esfuerzo (Borg) fue menor en los corredores Barefoot, pero sin significancia estadística.
Se encontraron correlaciones significativas:
- Para el total de la muestra: correlación positiva entre IMC y pulsaciones en el km 3 (p=0,048), y entre pulsaciones en el km 3 y pulsaciones en el km 14 (p=0,001).
- Para el grupo Barefoot: correlación positiva y significativa (p=0,001) entre ritmo y velocidad (pierna dominante, no dominante y media), y entre pulsaciones en el km 3 y pulsaciones en el km 14.
- Para el grupo Shod: no se encontraron correlaciones significativas.
La discusión reafirma la hipótesis respecto a la mayor eficacia cinemática de la técnica Barefoot, que aporta mayor rendimiento en atletismo de media distancia, aunque la mayor economía de esfuerzo no queda tan clara. Se destaca que correr descalzo se asocia a un mayor ritmo/cadencia de pasos y menores tiempos de vuelo y contacto, similar a otros estudios. Aunque los Shod mostraron mayor tiempo de contacto (que otro estudio relaciona con mejor economía), tuvieron menor velocidad y ritmo, mientras que los Barefoot con menor tiempo de contacto lograron mayor velocidad y ritmo. Se menciona que la zancada, aunque mayor en Barefoot, no mostró correlaciones significativas, pero podría ser un factor importante que requiere más estudio con muestras mayores. La menor diferencia en el aumento de pulsaciones para los Shod sugiere una posible mayor economía según una definición, pero al no ser significativa y partiendo los Barefoot de pulsaciones más bajas, no se puede afirmar que la economía de esfuerzo sea peor en estos últimos. Los resultados sobre IMC y FC se discuten con cautela debido a las limitaciones del IMC.
Las conclusiones principales son:
- Existen diferencias significativas entre las técnicas para el tiempo de vuelo (menor en Barefoot), y la velocidad media y ritmo de carrera (mayores en Barefoot).
- Se demostró una correlación positiva entre el ritmo de carrera y la velocidad media en los corredores Barefoot.
- La economía de esfuerzo (valorada por FC y percepción de esfuerzo) muestra parámetros similares sin diferencias significativas entre ambas técnicas.
- La técnica Barefoot incrementa el rendimiento deportivo según los parámetros cinemáticos de velocidad y ritmos medios, ya que su aumento implica una mayor distancia recorrida en el mismo tiempo de carrera.